Aprendí que con cada batalla soy frágil.
Que con cada esfuerzo me canso.
Que con cada experiencia puedo recibir una nueva decepción.
Pero aprendí, que de cada situación Dios sacó lo mejor de mi y que quien antes fuí no seré jamás.
Aprendí que con cada batalla soy frágil.
Que con cada esfuerzo me canso.
Que con cada experiencia puedo recibir una nueva decepción.
Pero aprendí, que de cada situación Dios sacó lo mejor de mi y que quien antes fuí no seré jamás.